“EUROPA TRABAJA Y NOSOTROS DE PUENTE”
Sí señores, esto es una muestra de crítica: crítica a un sistema laboral anticuado, crítica a una clase política desfasada, crítica a una sociedad sedentaria, que por mucho que critique a los políticos por la situación actual, no se da cuenta de que lo que verdaderamente potencia la economía y el crecimiento de un país es la actitud de cada uno: de cada empresa, de cada PYME, de cada autónomo, de cada estudiante, de cada obrero. En fin, luego nos extraña que no se nos tenga en cuenta a la hora de la toma de decisiones importantes en organismos como la UE.
Como saben, durante esta semana ha tenido lugar una cumbre entre los países miembros de la UE cuyo propósito era acordar una serie de medidas que permitan estabilizar la situación actual del Euro y de países como España e Italia, que son de suma importancia para la supervivencia de la moneda común.
Sé que mi opinión no es nada populista, e incluso yo en ciertos momentos no la comparto, pero en aquellos momentos (como éste) en que me paro a reflexionar y a pensar en el porqué de la situación actual de este país y en el porqué de la situación de nuestra sociedad, caigo en la cuenta de que todo tiene su punto de origen en la cultura.
Yo soy una persona cristiana, creyente, pero me parece que en la actualidad, la religión no debería ocupar una situación privilegiada en la sociedad sino una situación que la equipare a otras disciplinas. ¿O a caso el día que España ganó el Mundial fue fiesta nacional y la gente dejó de trabajar? Está claro que la gente está mucho más feliz cuando ganamos el mundial que cuando es la Virgen del Pilar ¿Por qué un país en el que (a pesar de que la mayoría seamos cristianos) poquísima gente practica la religión, todas las fábricas, empresas, compañías, autónomos y demás trabajadores tienen que parar por festividades religiosas? (No incluyo Navidad ni Semana Santa, puesto que son descansos necesarios para todos y en otros países también se realizan, sino con el sentido religioso con otro sentido) Me parece correcto que se celebren las fiestas patronales de cada pueblo, y que haya una cantidad estipulada de días festivos, pero no es aceptable, desde mi punto de vista que cada dos por tres tengamos fiestas debido a motivos religiosos, como en este caso es La Inmaculada o como la Virgen del Pilar en octubre. Claro, yo entiendo que para los diferentes gobiernos que han estado en el poder no es una medida populista ni atractiva, pero es una medida, bajo mi punto de vista, necesaria; al fin y al cabo la reducción de los días festivos supondría un pequeño aumento de productividad de nuestra economía.
¿Ustedes se imaginan a las industrias alemanas o francesas dejando de ir a trabajar por motivos religiosos? Oiga, yo creo que el que quiera celebrar un motivo religioso tiene el domingo para ello, de manera que si de verdad queremos salir del oscuro pozo en el que nos encontramos metidos arrimemos un poco el hombro todos, y pensemos en que lo que puede no ser tan bueno hoy puede que lo sea mañana, y que para superar un periodo de vacas flacas, lo necesario es hacer que crezca el prado donde estas tenga qué pastar. Así que les invito a la reflexión, si queremos ser importantes en Europa y en el mundo, debemos comenzar por cambiar algunos aspectos de la sociedad.
Carmelo Ruiz Simón